La economía colaborativa se está consolidando en México más rápido de lo que se creía y debido a que el crowdfunding es parte de esta, se le está poniendo especial análisis. Por lo que antes de mencionar en qué parte de México predominan las plataformas de crowdfunding, es importante que sepas brevemente lo que es la economía colaborativa.
Un estudio aplicado por NAFIN (Nacional Financiera) sobre el potencial de la economía colaborativa, la define como:
“Actividad económica desarrollada alrededor de plataformas en línea que permiten compartir bienes o servicios sub-utilizados de forma gratuita o por un precio sobre una base peer to peer (persona a persona).”
Según el estudio de NAFIN, el impacto de los modelos de economía colaborativa en la ciudadanía mexicana ha sido tal que es probable que ya utilices alguno de estos servicios pero no sabías que pertenecen a esta tendencia.
Quizá el ejemplo más notable hasta ahora para describir los productos o servicios que pueden surgir gracias a la economía colaborativa es UBER. Si lo analizamos bien, esta empresa no inventó el servicio personalizado de taxis, simplemente aprovechó la tecnología que usamos día con día y así evolucionar la forma de transportarnos.
Basta con tener un smartphone, abrir la aplicación, solicitar un automóvil y el más cercano llegará hasta dónde estés, además de la comodidad de que descuenten el costo de ese viaje directamente a una tarjeta bancaria.
Esto es lo que le ha dado tanto éxito a las plataformas, facilitar el acceso a servicios o productos a través de apps o plataformas web. Y es que el alcance de estas plataformas es inimaginable, desde alquilar bicicletas por trayectos, compartir asientos en tu propio coche, vender productos de segunda mano, hospedar turistas en tu casa, prestar servicios domésticos, invertir bajas cantidades de dinero en proyectos que te ofrecen buenos rendimientos, en fin.
Cada vez hay más empresas que, mediante aplicaciones facilitan el consumo de bienes y servicios que antes eran inaccesibles o de plano, no existían. Si quieres conocer otras ventajas, te invitamos a consultar “Los beneficios de la economía colaborativa en México.”
¿Y dónde queda el crowdfunding?
Retomando el estudio de NAFIN, con respecto al fondeo colectivo o crowdfunding, se mencionan aspectos muy interesantes, por ejemplo:
- El interés por participar en proyectos de crowdfunding es mayor entre los hombres.
- También se aprecia que en ambos sexos, el grupo de 25 a 34 años es el que manifiesta mayor interés por el fenómeno, mientras que los más jóvenes (de 18 a 24 años) presenta menos entusiasmo -que el de 25 a 34 años-. Aspecto que tiene que ver con su menor capacidad e independencia económica, sin embargo, El interés por este nuevo modelo de relaciones económicas es más visible entre los menores de 35 años, pero no podemos concluir que sea un fenómeno circunscrito a los jóvenes, pues se aprecia interés en todas las generaciones.
- Por lo tanto, cuanto mayor es la capacidad de inversión mayor es el conocimiento e interés por el crowdfunding.
- Incluso, según el estudio, lo mismo ocurre con el tipo de inversor, pues las personas con conocimientos de inversión más avanzados son también más propensas a participar en crowdfunding, especialmente en las modalidades de inversión (lending, equity y crowdfunding inmobiliario), ya que éstas personas están más atentas al fenómeno, muy por encima de los parámetros medios observados en la población investigada.
Las plataformas de crowdfunding en sus distintas modalidades tienen mayor presencia en Nuevo León, Ciudad de México, Jalisco y Estado de México. A continuación te compartimos la gráfica donde puede observarse el comportamiento en otros estados:
Tanto la economía colaborativa, como el crowdfunding, abren puertas a nuevos modelos de negocio, al mismo tiempo que impulsan la economía en nuestro país.
Pero sobre todo, representan una gran oportunidad para emprendedores que están buscando formas donde a través de la tecnología resuelven un problema de optimización de recursos.
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