Las tasa de interés o tipo de interés es el costo del dinero en tiempo, es el precio que se paga por tomarlo de terceros o se cobra por prestarlo, mientras más dinero se recibe prestado mayor será la cantidad a pagar por el préstamo.
Las tasas expresadas en porcentaje indican un balance entre la posibilidad de ganar y el riesgo.
La tasa de interés se calcula en base a las variaciones que existen entre la oferta y la demanda de fondos que se presentan en una economía.
Las tasas de interés bajas favorecen la inflación e incentivan el consumo y las tasas de interés altas contribuyen al ahorro evitando que se disparen los precios.
Con la finalidad de establecer una tasa de interés interbancaria que pueda de una manera más fiel representar las condiciones justas del mercado, el Banco de México en 1996 creo la TIIE (Tasa de Interés Interbancaria de Equilibrio), la cual es utilizada por las entidades financieras como parámetro para establecer el interés que cobran por los productos financieros.
Los tipos de tasa más utilizados son:
Tasa de interés activa: Cobradas a los clientes por las entidades financieras por los diferentes tipos de servicios de créditos otorgados.
Tasa de interés pasiva: Pagadas por las entidades financieras a quien deposita dinero en sus cuentas.
Tasa de interés preferencial o prime rate: Mínimo que cobra una entidad financiera en una operación de crédito.
Tasa de interés real: Rendimiento neto que se obtiene en la cesión de dinero teniendo en cuenta los efectos y los cambios en la inflación.
Tasa de interés externa: Pagada por el uso de capital externa y establecida por las instituciones que otorgan los recursos financieros.
Tasa nominal: Porcentaje obtenido de una operación financiera capitalizada de forma simple.
Tasa objetivo o tasa de fondeo interbancario a un día: Se establece para que los bancos la uses como referencia y suele ser una tasa de corto plazo.
Tasa efectiva anual: Calcula la rentabilidad de los ahorros de un crédito esperados en un plazo de un año.